miércoles, 26 de junio de 2013

Este día sin título.

A veces desearía ser la vela de un delicioso pastel de cumpleaños. Que alguien llegase con una sonrisa y los ojos brillando y soplase fuertemente sobre mí, hacía mí, en mi dirección. Fugándose mi fuego, apagándome. Desaparecer de un plumazo, como la llama de un pastel de cumpleaños. O como esa vela que no vas a volver a utilizar.

Y al año siguiente retornar la chispa, si lo deseo o lo desean o lo que Dios quiera.

Pero ahora, por favor, apagarme.


Apagadme, que vuelvo a no encontrarme...
Que he vuelto a ser estúpida, a fracasar.